Debería de escribir las cosas cuando las pienso y no guardármelas. Ahora cualquiera que me lea podría pensar que una vez visto lo sucedido es fácil de decir, pero en cuanto me enteré del precio que tenía la nueva consola de videojuegos de Sony, la PS3, y el precio que tenía la Wii de Nintendo, pensé que Nintendo iba a arrasar en el mercado del videojuego y no me equivoqué.
La subida de las acciones de Nintendo ha hecho que el valor de la empresa supere al de su competencia directa, Sony.
Es totalmente lógico. Respecto a las mini-consolas portátiles, ya la Game Boy de Nintendo había conseguido saturar el mercado. En el proceso de renovación, Sony saca la PSP y a la vez Nintendo saca la DS, esta última con doble pantalla, una de ellas táctil, y pensada para soportar todos los juegos de su antecesora la Game Boy. Además fue lanzada con el Brain Training que es fantástico, y esto lo digo con conocimiento. El resultado es que la DS le ha ganado la partida a la PSP.
Y respecto a las llamadas consolas “de salón”, por lo que he oído la PS3 es superior técnicamente además de admitir todos los juegos de su hermana mayor la PS2 y estar preparada para leer los nuevos formatos de vídeo que está previsto que sustituyan al DVD. Pero el precio totalmente desorbitado de esta consola y la magnífica publicidad dada al nuevo mando de la Wii han inclinado la balanza a favor de la consola de Nintendo.
Mi hijo se acaba de comprar, con el dinero que le han regalado en su primera comunión, la PS2. Pensamos qué consola comprar y la PS3 fue rechazada inmediatamente por su precio, nadie en su sano juicio se gasta 600€ en una consola para que juegue el niño los fines de semana y jugar uno de vez en cuando, especialmente habiendo alternativas mucho más económicas. Entre la Wii y la PS2, acabamos decidiéndonos por la de Sony por la única razón de que mis sobrinos ya tenían la 2 y ahora pueden intercambiarse juegos.
Por ello pensé, ya hace una temporada, que Nintendo se iba a hacer con el mercado de las consolas pero sólo gracias a la inestimable ayuda de Sony, que han hecho gala de una torpeza empresarial especialmente llamativa en una empresa de semejante calibre. Si me dedicase a la bolsa, ya hace tiempo que habría comprado acciones de esta compañía, pero no me dedico a ello.
Por cierto, hablando de esto, creo que con el nuevo iPhone de Apple se puede repetir la situación que se produjo con el iPod, se duplicó el precio de las acciones, se hizo un “split” (hacer que cada acción se convirtiera en dos de mitad de valor cada una) y se duplicó de nuevo el valor. Es decir que de unos 70$ se pasó a 140, se hizo el “split” generando nuevas acciones de 70 que volvieron a aumentar a 140. Es decir que cada 70$ se convirtieron en 280 aproximadamente, se multiplicaron por 4.
La subida de las acciones de Nintendo ha hecho que el valor de la empresa supere al de su competencia directa, Sony.
Es totalmente lógico. Respecto a las mini-consolas portátiles, ya la Game Boy de Nintendo había conseguido saturar el mercado. En el proceso de renovación, Sony saca la PSP y a la vez Nintendo saca la DS, esta última con doble pantalla, una de ellas táctil, y pensada para soportar todos los juegos de su antecesora la Game Boy. Además fue lanzada con el Brain Training que es fantástico, y esto lo digo con conocimiento. El resultado es que la DS le ha ganado la partida a la PSP.
Y respecto a las llamadas consolas “de salón”, por lo que he oído la PS3 es superior técnicamente además de admitir todos los juegos de su hermana mayor la PS2 y estar preparada para leer los nuevos formatos de vídeo que está previsto que sustituyan al DVD. Pero el precio totalmente desorbitado de esta consola y la magnífica publicidad dada al nuevo mando de la Wii han inclinado la balanza a favor de la consola de Nintendo.
Mi hijo se acaba de comprar, con el dinero que le han regalado en su primera comunión, la PS2. Pensamos qué consola comprar y la PS3 fue rechazada inmediatamente por su precio, nadie en su sano juicio se gasta 600€ en una consola para que juegue el niño los fines de semana y jugar uno de vez en cuando, especialmente habiendo alternativas mucho más económicas. Entre la Wii y la PS2, acabamos decidiéndonos por la de Sony por la única razón de que mis sobrinos ya tenían la 2 y ahora pueden intercambiarse juegos.
Por ello pensé, ya hace una temporada, que Nintendo se iba a hacer con el mercado de las consolas pero sólo gracias a la inestimable ayuda de Sony, que han hecho gala de una torpeza empresarial especialmente llamativa en una empresa de semejante calibre. Si me dedicase a la bolsa, ya hace tiempo que habría comprado acciones de esta compañía, pero no me dedico a ello.
Por cierto, hablando de esto, creo que con el nuevo iPhone de Apple se puede repetir la situación que se produjo con el iPod, se duplicó el precio de las acciones, se hizo un “split” (hacer que cada acción se convirtiera en dos de mitad de valor cada una) y se duplicó de nuevo el valor. Es decir que de unos 70$ se pasó a 140, se hizo el “split” generando nuevas acciones de 70 que volvieron a aumentar a 140. Es decir que cada 70$ se convirtieron en 280 aproximadamente, se multiplicaron por 4.
1 comentario:
En casa tenemos la PS2 con la que organizamos extraordinarios campeonatos de MotoGP (a mis hijas les encantan las carreras de motos). La consola tiene ya bastantes años y ha sufrido alguna que otra reparación pero sigue funcionando bastante bien. Mis hijas han probado en casas de amigas la Wii y están totalmente emocionadas y bastante pesaditas para que la compremos, cosa que de momento no va a ocurrir. Estoy contigo en que gastarse 600 Euros en una consola es totalmente injustificable. Al final lo que interesa es que se pueda jugar con ella y todos los aditamentos (DVD y demás) son totalmente prescindibles.
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