13 oct 2008

Blogueros pedantes.

Últimamente, buceando por la blogocosa, me he encontrado varios blogs que hacen apología de la rimbombancia, del “peer en botija” que dirían en algunos pueblos de España. Para quien no conozca esta expresión popular, y muy acertada, se basa en que un pedo dentro de una botija resuena mucho, y se refieren a aquella cosa o a aquella persona que busca llamar la atención.

Decía que me he encontrado blogs que son la casa de la petulancia y el rebuscamiento. En general, son de autores a los que se les nota que les encanta leerse y, seguramente, también escucharse. Que escriben para ellos mismos y, con condescendencia, permiten que algunos comenten lo que ellos escriben, pero con limitaciones, por supuesto.

Se trata de blogueros que rebuscan en el diccionario las palabras y las expresiones, que retuercen las frases y que suelen requerir dos o tres lecturas para entender lo que quieren decir. Son de esos que se creen que escriben maravillosamente y utilizan constantemente expresiones como “en base a” o “a nivel de”, que cuando hablan de naufragios dicen “pecio”, metiendo la pata hasta la ingle porque no significan lo mismo, o para referirse a una explosión dicen “deflagración”, patinando terriblemente pues son cosas diferentes, o que se refieren a la violencia de una acción como “virulencia”, como si se tratase de una enfermedad vírica que es lo único que puede ser virulento, lo demás es violento. Por poner sólo algunos ejemplos muy típicos. Estas cosas se ignoran cuando el escritor es una persona normal que no pretende dar lecciones, pero con uno de esto pedantes es imperdonable.

Estos señores se creen que por ser petulantes y engolados escriben mejor, olvidado que el idioma es una herramienta de comunicación y que, si no sirve para comunicarse con claridad, no se está utilizando correctamente sino que se le están dando patadas.

Es posible, o mejor dicho es una realidad, que yo a veces utilizo expresiones más o menos vulgares, que soy “poco refinado”, pero lo que no puede decirse de mí es que no se entiende lo que escribo por ser pedante y retorcido. Puede que no siempre sepa explicarme con claridad, pero no será por utilizar “palabros”. Discúlpenme mis lectores si les parece que a veces utilizo un lenguaje poco culto, pero es que la función del lenguaje es la transmisión de ideas y eso no puedo obviarlo para dedicarme a “lucir mi dominio del diccionario”. No soy un repelente rebuscado y petulante.

Pero esta forma de escribir no es más que la plasmación de la personalidad del bloguero de turno, ya que son gente que tiene un blog para que los comentaristas les adulen, les digan lo bien que escriben, lo profundo de sus pensamientos y, si me apuras, hasta lo guapos que son, pero en cuanto se les presenta una discrepancia, por muy argumentada y educadamente que sea, les sienta fatal y, si no al primero, al segundo comentario te banean, eso sí, sin ser capaces de dar ni una sola argumentación que defienda lo que dicen y rebata a quien no está de acuerdo con ellos. Es evidente que en estos blogs no suelo aguantar más de un par de visitas.

Es fantástico ver cómo el narcisismo y la vanidad se manifiestan en todas las actividades que el vanidoso narcisista lleva a cabo, y cómo este tipo de personajes, que se creen por encima del resto, son los que más errores de todo tipo comenten en su intento de ser más que nadie.

¿Y sabéis qué es lo mejor de estos blogueros? Pues que luego se permiten dar clases de lo que es tener una mente abierta al debate y la discrepancia y se ponen como ejemplo de argumentación y conocimiento.

Personalmente prefiero reconocer mis limitaciones y admitir que hay cosas que me tocan la moral y no las consiento en mi blog, pero yo no me pongo de ejemplo de nada, es más, tengo un buen montón de defectos, pero soy consciente de ello.

¡Qué pena dan!

34 comentarios:

Ignacio dijo...

Tranquilo: TODOS somos conscientes de tus defectos, hasta los que ni saben que existes, pero no busques la virtud donde no la hay ni la excelencia en la mediocridad.
Lee a Gombra.

Interruptor dijo...

Sí, sé que mis defectos son universalmente conocidos, la pena es que yo no lo sea tanto como mis defectos.

No busco la excelencia en donde no puede haberla, no le pido peras al olmo, simplemente me llama la atención comprobar que aquello de “dime de qué presumes y te diré de qué careces” se cumple siempre. O como decía una chica de la que hace años que no sé nada: “siempre habla el más cagao”.

Es curioso comprobar cómo, el que intenta estar por encima sólo demuestra estar por debajo. El que realmente está por encima lo hace sin quererlo.

¿Cómo llamas tú a este tipo de elementos? ¿”huelebragas”?

Ignacio dijo...

A esos los Carlistas los llaman "Zumalacárreguis" en la blogosfera se les conoce por dos cosas: son ellos, no se reconocen pero reconocen a otros: son los egobloggers.

Yo a todos sos los encajono en un vocablo de percepción mas amplia:
Infraseres.

Lucía dijo...

Sabes lo que tienen los blogs? que como en ellos escribes y no te ven la cara ni te conocen uno se atreve a decir o fingir lo que cara a cara no haría o no podría disimular ( esto se suele decir de los adolescentes en el tuenti o en MSN pero creo que se puede aplicar a muchos más).Los blogs son la vida misma, lo que hay...

Ignacio dijo...

¿A que voy a ser el unico gilipollas que pone su nombre y su cara?

Natalia Pastor dijo...

Una cosa es que alguien escriba bien, tenga dotes literarias y un estilo, y otra muy distinta la pedanteria, que además de cargante,te obliga tener el diccionario a mano cad vez que te enfrentas a un bloggero con afán de emular el gongorismo.

Luis Amézaga dijo...

Cuidado, tampoco está de más recordar que eres muy guapo.

Ignacio, ¿ese callejón tiene salida?

Ignacio dijo...

.........si quieres te digo por donde

Interruptor dijo...

No, Ignacio, mejor....... no desveles el secreto que se pierde el misterio. xD

Lucía dijo...

Oye, tu no sabes escribir sin insultar? porque a pesar de que te veamos la cara tu forma de escribir no te deja en buen lugar...

Interruptor dijo...

Boo, no ha insultado en ningún momento, lo de gilipollas se lo aplicaba a él mismo.

Y lo de la respuesta a Luis... es que donde hay confianza da asco.

Ignacio dijo...

Se trata de saber leer, simplemente.
Se escribir insultando, con una certeza y un tino que no suele quedar igual la configuración psicológica del zaherido, pero me temo que aquí nos enfrentamos a un simple y clásico problema: el de que quien no sabe leer, da lecciones.
Y bueno, en según que lugares o segun quien me juzga prefiero estar en mal lugar, o en ninguno.

y tranquilos por Luis, que si se siente atacado, sabe todas las maneras posibles de hacérmelo saber.

Elentir dijo...

Es cierto que hay blogs muy pastosos, Interruptor. Hay un paisano nuestro, por ejemplo, que siempre consigue dormirte al primer párrafo.

Eso sí, hay otra costumbre bloguera que me parece más fea: la del típico niñato que tiene que poner tres o cuatro tacos en su artículo para creerse más hombre, y que mide el tamaño de su ego por el grueso de las palabrotas que suelta.

A mí me dijo un amigo de izquierdas (muy de izquierdas) hace años que él nunca ponía tacos por escrito, y eso que era muy mal hablado. Decía que ponerlos por escrito era especialmente desagradable, sobre todos para quienes lo leen. Lo que demuestran quienes se hacen los machitos poniendo una grosería en cada frase es que son unos inmaduros y tienen poco aprecio por los demás. Y te digo esto porque vengo de leer a uno -no diré quién es- que escribe así todos sus artículos.

Interruptor dijo...

Hombre, Elentir, a mí no me agrada leer un artículo plagado de improperios, pero yo soy de la escuela de Cela, una buena palabrota en el momento oportuno es insustituible y permite entender la contundencia o el estado de ánimo del que escribe. Una palabra gruesa de vez en cuando no hace mal a nadie.

Sin ánimo de molestar, dices que vienes de leer a uno que escribe así y que eso te molesta ¿¿Por qué lo lees?? Yo a la segunda visita que me desagrada no regreso.

Anónimo dijo...

Cachis, lo que me he perdido. O llego tarde o el blog va muy rápido.
La verdad es que como voy muy rápido y soy muy despistada no aguanto mucho blogs que tenga que leer dos veces para entenderlos. Hay alguna vez que releo pero porque me ha gustado o porque se me escapan los matices.
No sé. Haré exámen de conciencia por si acaso. Hago uso del diccionario, sobre todo por la ortografía...
De todas formas, si un blog no comunica porque no hay quien lo entienda él sabrá porqué escribe...
Benita

Lucía dijo...

Si es vuestro estilo...A mí me parece un ejemplo de lo que trata ésta entrada...

Mary White dijo...

Se de quién hablas,Elentir... jejeje...

Interruptor, también sé de qué tipo de blogs hablas...jejeje...

Ignacio, yo sí doy la cara.

Ignacio dijo...

Pues el calificativo te lo pones tu, que en este blog me han dicho como debo escribir y hablar; así que seré mas que comedido con estos temas, por el amigo interruptor, obvio.

Me honra mucho estos desprecios.

Elentir dijo...

No lo leo, Interruptor. Me lo encuentro cada vez que entro en un agregador, y en puesto destacado. En esto la culpa es también de los lectores, que premian con un "click" a quien siente tan poco respeto por ellos.

Como ya he dicho, yo no soy nada finolis en esto de los tacos, más bien tengo un lenguaje legionario... Pero una cosa es el lenguaje coloquial y otra cosa es hacerse el hombre escribiendo tacos sin venir a cuento.

Y sí, Mary, me apuesto lo que quieras a que estamos pensando los dos en el mismo...

francisco dijo...

Yo no estoy de acuerdo con el tema de que usar tacos en un texto sea de mal gusto:desde Quevedo a Cela, pasando por Pérez Reverte, multitud de escritores califican una acción o personaje con un taco.
A mi lo que me molesta es la vaguedad, la indefinición, el tirar la piedra y esconder la mano.
Por ejemplo,Elentir con todo esta cháchara tipo "Me lo encuentro cada vez que entro en un agregador, y en puesto destacado".
Diga aquien se refiere y santas pascuas.

Anónimo dijo...

Este post y algnos comentarios como los de Elentir, tienen el inconfundible aroma de la mezquindad y la envidia soterrada.
Como dice el anterior comentarista,nada más facil y de hombría que señalar a quien se refieren con las apreciaciones, con nombres y apellidos.
Lo contrario es de una cobardia insultante.

Interruptor dijo...

Santos, este post no rezuma envidia por ningún sitio. Puedo tener envidia de muchas cosas, pero de quien maltrata nuestro idioma no tengo la más mínima envidia, y ya no te cuento de quien no permite ni un comentario que no sea decirle “pero qué bonito eres”.

Esto responde también a Francisco: el no decir en concreto de quién se habla, en mi caso es por dos razones: una porque se trata de más de uno y no voy a dedicar el post a enumerar todos los blogs pedantes que he encontrado, y otra es porque, aunque sólo fuesen un par de ellos, no pretendo que nadie deje de leer un blog por mi opinión, cada cual es libre de decidir qué blogs quiere leer y cuales no, sin que yo tenga por qué influir, de hecho sé que algún lector de este blog es también lector de alguno de esos petulantes e incluso lo tiene un buen blog.

El tema del post no es desprestigiar a nadie, sino hacer notar cómo hay un tipo de blogueros muy concreto y, a mi modo de ver, desagradable que se repite de forma clónica, y comentar cuál es el motivo de que me resulten desagradables, pero a lo mejor hay gente a la que esa forma de escribir le parece maravillosa ¿por qué decir nombres?

Además de esto, como sé que no son lectores de este blog, al menos la mayoría de ellos estoy seguro de que no lo son, no voy a decir nombres de quien no puede defenderse por no saber que aquí se habla de ellos.

Saludos.

Elentir dijo...

Lo que sería cobarde sería mencionar a esa persona y ponerla a caldo a sus espaldas. No veo qué necesidad hay de citar nombres para personificar ejemplos. Si alguien prefiere debatir sobre Fulanito o Menganito, allá cada uno. A mí no me importan tanto los nombres como el estilo, que es de lo que aquí se habla.

Anónimo dijo...

Pues lo siento, pero me mantengo en que es una cobardía y que tiene el inconfundible tufo de la mendacidad y la envidia.
El comentario de Elentir no tiene desperdicio:"...Me lo encuentro cada vez que entro en un agregador, y en puesto destacado.".
¿A quien se refiere?.¿No desprende el comentario el inconfundible aroma de la envidia soterrada?.
Y si no lo dice aquí,por que según usted no está presente,¿ha entrado en su blog y se lo ha dicho a la cara?¿le ha enviado un e-mail?.
¿A que no?.
Pues eso,...que dice la copla...

Interruptor dijo...

¡A que sí!

Pues sí, señor Santos, se lo he dicho en su blog a más de uno. No les he llamado pedantes directamente para que no se sintieran ofendidos, pero les he escrito críticas, intentando que fuesen constructivas y no insultantes, sobre su manera de escribir y de maltratar el idioma, el resultado ha sido que siempre, sin excepción, me han borrado el comentario y me han llamado de todo, unos con grosería evidente y otros con más retintín y petulancia acorde con su estilo.

Tengo por costumbre no hablar de nadie a sus espaldas si no se lo he dicho antes a él o ella. Pero repito que mi intención no es poner verde a nadie, sino llamar la atención sobre un estilo de bloguear que me parece penoso, que me parece que hace mucho mal a la blogosfera. Hablo de estilos, no de personas.

Sobre la envidia, usted mismo verá si me puede parecer envidiable. Si así fuera, escribiría de esa manera engolada, que no es difícil, simplemente es pesado y molesto para quien lo lee.

Y en el caso de Elentir, siendo uno de los 100 blogs de España con más visitas y más seguidores, considerado entre los más influyentes, no creo que le tenga envidia a ninguno de esos, sería completamente absurdo sentir envidia de quien tiene mucho menos éxito que tú.

Un saludo.

Interruptor dijo...

A ver si me explico. Yo tengo una cierta envidia (sana) de Montse, del blog Internet Política, o de JJG Noblejas de Scriptor, o de Omalaled de Historias de la Ciencia, o de Luis Amézaga de Diencéfalo, por la calidad de sus blogs, plagados de magníficos post, todos escritos con un estilo muy por encima de lo que estamos acostumbrados a leer tanto en la red como en la prensa. O puedo tener envidia de Elentir porque Contando Estrelas tiene un diseño de enorme calidad y es uno de los blogs más visitados de la blogosfera española. O puedo tener envidia de Ignacio, de Este lado de la Galaxia, por su capacidad de postear mucho y variado de forma amena y con un enorme sentido del humor. O puedo sentir envidia de Embajador en el Infierno, del blog de su mismo nombre, por si capacidad crítica y su capacidad de extractar. O de Hilda y Benita de La Cámara de las Meditaciones y Mis Jefes Llevan Chupete respectivamente, por la sinceridad y la naturalidad que derrochan. Hay muchos blog capaces de hacerme sentir una cierta envidia.

Pero ¿por qué tener envidia de alguien a quien casi no se le entiende y que no permite la más mínima discrepancia, de alguien con blogs con tan poco éxito como el mío o menos aún, con unos post ladrillo? Es que no veo qué es lo que puede causar envidia, lo que me produce es desagrado y me llama la atención la abundancia, y por eso lo comento.

Si con esto no consigo que me entienda, lo siento, no sé explicárselo mejor.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Interruptor;
las preguntas de mi anterior comentario, no iban dirigidas a usted, si no a Elentir.
Respecto a su lista de bloggeros "envidiables", yo que enseño literatura, le puedo indicar que sólo es salvable Amézaga, de Diencéfalo.
El resto son juntaletras.
Aplicados,si, pero juntaletras.
El mejor bloggero, de los que yo conozco, y soy un carnívoro de la red, ni siquiera tiene blog.
Colabora en uno.
Saludos.

Interruptor dijo...

Hombre, es evidente que la calidad literaria de Luis no la tiene el resto, por algo será que Luis ha publicado varios libros. Pero sin buscar una calidad literaria sobresaliente no me negará que a Montse y a Noblejas se les nota su profesión y escriben muy por encima de lo que habitualmente se encuentra en la red, y Omalaled lo menciono, más que por su calidad en la forma de escribir, por su manera de explicar conceptos que a veces son bastante complicados, son una sencillez asombrosa.

De todas formas ya le digo que muchos me parecen “envidiables” por motivos diferentes a su forma de escribir: por su humor, por su calidad humana, por su labor periodística, etc. Algunos, como Marta Salazar, son mucho mejores que cualquier diario digital o en papel.

Por cierto, yo soy un perfecto ignorante en lo que a poesía y rimas se refiere. Por curiosidad ¿qué opina usted de Monsier de Sans Foi, de Zapaterías Rimadas? Y me refiero a su calidad escribiendo, no a si está usted de acuerdo o no con lo que dice.

Gracias.

Anónimo dijo...

Me parece que tiene grandes cualidades Monsier de Sans Foi:un manejo de la rima y la métrica perfectos.
Eso si, no comparto en un 90% sus argumentos.
Me parece lo mismo que Gutiforever, ese colaborador que antes le mencionaba;escribe magníficamente, con un dominio de la estructura apabullante y con una fuerza indiscutible, aunque discrepe profundamente de su ideología y forma de pensar.

Interruptor dijo...

Muchas gracias por su opinión.

Además veo que la ideoogía no le impide valorar las virtudes de otros, eso dice mucho de usted.

Saldos.

Ignacio dijo...

El que dice que enseña literatura, tiene pinta de tener que aprender a leer; pero seo considera autoridad para valorar quien vale y quien no; la tal boo me dice a mi como he de escribir sin haberme leido, uno que dice ser Santos pero no se identifica pontifica; elentir en su linea justifica como norma de universal universalidad el ser un pazguato y un timorato: si se ha de decir algo se dice, si ha de callar se calla.

Esto es un post de metalenguaje: has acabado dando pábulo a los pazguatos que pretendias definir en el post.

Aquí los tienes, dando cátedra, metiéndose en mi relación con luis, diciendo a todos LO que es la verdad.

Ese es el problema interruptor: la mojigateria, la pazguatez, el relativismo,el creerse en posesión de la verdad, abundamucho en la blogosfera; ya tienes la respuesta que te preguntabas.

Interruptor dijo...

Ignacio, no es cuestión de si doy o no pábulo a unos u otros. Me gusta que todos digan lo que piensan y sólo corto, o incluso puedo banear, a quien demuestra ser un troll. El resto que hablen y digan lo que quieran, que cada cual se define a sí mismo con sus palabras.

No voy a negarle la palabra a nadie por ser de una forma u otra mientras no haga el troll.

Cada cual tiene sus defectos, yo los míos, tú los tuyos y el resto los suyos, yo los tolero y espero que me toleren los míos.

Lo que critico en el post no es eso, sino al que no sabe escribir y se cree un genio y no admite ser corregido o aconsejado en sus errores.

Tienes razón en una cosa: el problema son aquellos que se creen en posesión de la verdad absoluta y de ahí su incapacidad para reconocer sus defectos y para aceptar una crítica.

Anónimo dijo...

Ignacio:no se me ponga de manos, por que yo a usted no lo he insultado, ni menospreciado.
Sólo he respondido a una pregunta de Interruptor, y he realizado una simple valoración sobre las cualidades literarias de los bloggeros que el dueño de este blog mencionaba.
Que no me guste como escribe usted, no significa nada, sólo eso.
No es para que me descalifique, aunque allá usted como afronta las críticas.
El creerse que uno es William Faulkner suele traer dramáticas consecuencias.

Ignacio dijo...

Ese es el asunto: que pones en mi cualidades que nada tiene que ver conmigo; si te vale a ti no sgnifica su universalidad sólo es tu criterio de análsis: que no lo vea yo propicio no significa que no te sea valido: pero de ahí a establecer universales categóricos, pues no. Y bueno, a lo mejor volvemos a la pregunta de interruptor: la gente nos calficia por nuestros defectos, y no por una secuecnia objetiva de análisis, por esa razón en este desgraciado pais apiolaron a Santa Teresa, a San Ignacio, porque no eran "políticamente correctos" aunque quizá tambien ellos s creían quee ran alguien, y sólo quisieron ser ellos mismos.

Ese es el asunto: el aparentar y el ser, que cada cual escoja.