2 may 2011

Bin Laden


No me alegro de la muerte de nadie y hubiese preferido que lo cogiesen con vida y lo colocasen ante un tribunal que lo condenase a cadena perpetua. Pero, desde luego, no voy a dejar de sentir alivio por saber que este tipo ya no podrá seguir financiando el terrorismo con su fortuna personal y sus negocios, ni podrá ordenar el asesinato de nadie.

Pero lo que me parece más importante de todo esto es eso a lo que nunca se presta atención y de lo que no se hablará en los medios, y es que a mí me preocupan más las almas que los cuerpos, y me preocupan todas por igual. Con esto quiero decir que el alma de Bin Laden también me preocupa, y aunque estoy convencido de que ha muerto sin arrepentirse de absolutamente nada de lo malo que ha hecho, yo no voy a dejar de rezar por su alma y por los que con él han muerto o han matado, rezaré pidiendo que el odio desaparezca de los corazones de la gente y que, para ellos, Dios deje de ser una excusa para matar.

Sí, soy así de extraño, pero cuando me entero de que alguien asesina a otra persona, no pienso sólo en orar por las víctimas, sino que pienso también es hacerlo por los asesinos.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Tampoco me alegro y como ayer fue el Domingo de la Misericordia rezaré contigo.Un abrazo.

Ignacio dijo...

Yo si me he alegrado.

Ignacio dijo...

Yo si me he alegrado.

Anónimo dijo...

Tampoco podemos decir, que no haya
habido tiempo para el arrepentimiento
aún asi sabemos que sigue habiendo muchos Bin laden, que promueven el odio y la gerra. dejemos los juicios a Dios, ya que los homres no siempre
son justos. y oremos tambien por los otros Bin laden, y otras personas que celebran la muerte de un ser humano, como de una vitoria de un equipo de las que estamos tan acostunbrados. elpidio

Natalia Pastor dijo...

De entrada es una magnífica noticia que un terrorista criminal y despiadado, que tantas miles de muertes tiene sobre sus espaldas,sea eliminado.

De todas formas, como reflexión, imaginad que en vez de ser bajo el mandato del santón de Obama, el premio Nobel de la Paz(???),hubiera sido bajo el odiado Bush; toda la progresía e izquierda mundial lo estaría acusando de irresponsable,de incendiar el mundo y de poner a Occidente en el punto de mira de las represalia

Emperador dijo...

Se ve que eres una persona de sentimientos nobles. A mí tampoco me alegra aunque desde luego no lo siento en absoluto.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Sin duda es un alivio, pero ante el Juicio personal y la posibilidad de no arrepentimiento de un hermano uno siente una tremenda pena por cada muerto del que públicamente se conoce la maldad. Dios es rico en misericordia y a ella apelamos, nuestra alegría está en Dios.

Algún día, espero, seguramente podremos alegrarnos al conocer la misericordiosa Justicia de Dios tanto en los salvos como en condenados, pero desconociendo esos detalles me uno a la obra de misericordia de Interruptor.

"El señor no tarda en cumplir lo que ha prometido, como algunos se imaginan, sino que tiene paciencia con ustedes porque no quiere que nadie perezca, sino que todos se conviertan."

Hilda dijo...

Que hermoso pensamiento Interruptor, la muerte de nadie debe ser motivo de regocijo. Sí, es un alivio como bien dices, saber que no seguirá dañando pero ahora está ante un tribunal más sabio y caritativo que el ser humano. Que sea Dios quien lo juzgue. A nosotros nos queda orar por nuestros enemigos y sobre todo ser mejores personas para que el odio no exista en nosotros y así formar una cadena. Todo cambio global inicia con un cambio individual.

Saludos. Hilda