Noticia curiosa: un perro antidroga captura a un gato camello.
Un preso amaestra a un gato al que acostumbra a comer con él. Luego consigue hacérselo llegar a los amigos, éstos hacen pasar hambre al pobre gato, le ponen droga en el collar y lo dejan libre junto a la prisión para que vaya a buscar al preso con la intención de que lo alimente y así llevarle la droga. Ingenioso, la verdad.
Pero los funcionarios de la prisión se enteran y encargan el asunto a un perro adiestrado para detectar narcóticos. El pobre gato sale tan dañado de la “detención” que al final no sobrevive.
¿Acusarán al perro de brutalidad policial y abuso de autoridad?
¡Cosas veredes!
Nota: Por cierto, ya que estamos, la expresión “cosas veredes” que habremos oído muchas veces, así o en sus formas largas “cosas veredes, amigo Sancho” o también “cosas veredes, Sancho, que farán fablar las piedras”, no está extraída, como se suele pensar, de El Quijote, sino que es una deformación de unos versos de El Romancero del Cid que se supone que dice el Rey: “ Cosas tenedes, el Cid, que farán fablar las piedras”. Curioso ¿verdad?
Un preso amaestra a un gato al que acostumbra a comer con él. Luego consigue hacérselo llegar a los amigos, éstos hacen pasar hambre al pobre gato, le ponen droga en el collar y lo dejan libre junto a la prisión para que vaya a buscar al preso con la intención de que lo alimente y así llevarle la droga. Ingenioso, la verdad.
Pero los funcionarios de la prisión se enteran y encargan el asunto a un perro adiestrado para detectar narcóticos. El pobre gato sale tan dañado de la “detención” que al final no sobrevive.
¿Acusarán al perro de brutalidad policial y abuso de autoridad?
¡Cosas veredes!
Nota: Por cierto, ya que estamos, la expresión “cosas veredes” que habremos oído muchas veces, así o en sus formas largas “cosas veredes, amigo Sancho” o también “cosas veredes, Sancho, que farán fablar las piedras”, no está extraída, como se suele pensar, de El Quijote, sino que es una deformación de unos versos de El Romancero del Cid que se supone que dice el Rey: “ Cosas tenedes, el Cid, que farán fablar las piedras”. Curioso ¿verdad?
1 comentario:
Jojojo. ¡Qué bueno!
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