El tema de hoy parece obligado, y eso no me gusta porque me fastidia que algo se me imponga, tanto que es probable que no diga nada sobre el próximo debate (si es que hay realmente debate, porque ayer, como dijo esta mañana FJL, no fue precisamente un debate) entre los candidatos a la presidencia. Pero voy a ser dócil por una vez y sin que sirva de precedente y voy a hablar sobre la charla de ayer entre Solbes y Pizarro.
Aunque según las encuestas hubo claros ganadores, yo no lo veo así. Según las encuestas de El Mundo, la percepción de los ciudadanos es que Pizarro barrió a Solbes, pero según la encuesta de TNS Demoscopia para Antena3 fue Solbes el que dejó tocado a Pizarro. Pues yo no he visto tales resultados, la verdad, yo he visto una mejor imagen de Solbes pero por un pelo.
Antes del debate (le llamaré así por llamarle de alguna manera), oía cómo mucha gente de derechas tenía clarísimo que Pizarro iba a comerse al socialista. Pues yo no lo tenía tan claro por dos motivos, el primero es que Pizarro es un novato en esto de enfrentarse a las cámaras, con moderador y dando imagen, lo suyo con los consejos de dirección y las juntas de accionistas, pero en la política es un principiante, mientras que Solbes ha pasado prácticamente toda su vida en estas labores y eso se nota. Por otro lado Pizarro está limitado por las órdenes de Génova de ser suavecito no sea que nos llamen crispadores, y sin embargo Solbes puede actuar a placer creando tensión o transmitiendo paz según convenga.
Centrándome en el debate, mi valoración se divide en dos aspectos: contenidos e imagen transmitida.
En el apartado de contenidos me ha dado una sensación de empate total y absoluto. Ninguno de los dos ha conseguido aplastar al otro con datos. Pizarro porque se calló muchos datos (supongo que por esas órdenes de Génova que no tienen ningún sentido) como el número de familias que no pueden pagar sus hipotecas y las Cajas de Ahorros se tambalean, o los dineros que cuesta al resto de los españoles el estatuto catalán, o los datos concretos del déficit por cuenta corriente (por si alguien no sabe lo que es esto, se refiere a que en las transacciones internacionales –importación y exportación– gastamos muchísimo más dinero del que ingresamos y eso nos empobrece a pasos agigantados). Y Solbes, simplemente porque no podía sacar nada mejor de lo que sacó con los datos que hay, y ya los moldeó y reconstruyó bastante con interpretaciones, en ocasiones, un tanto pintorescas.
Dicho esto, la cuestión interesante fue la de la imagen transmitida. No sé si por inexperiencia, por nerviosismo o por esa táctica pepera de no agresividad, de perfil bajo, el caso es que Pizarro comenzó tímido, blandito e inseguro, pero fue creciendo poco a poco hasta llegar a superar a su contrincante por momentos. Pero esa actitud inicial permitió a Solbes tomar la postura del viejo maestro sosegado que sienta cátedra cada vez que abre la boca. La falta de agresividad verbal de Pizarro le permitió mantener esa pose durante todo el debate, postura en la que fue fundamental el reconocimiento de algunos pequeños problemas que sufren los españoles, de forma que en cierto modo desactivaba los posibles ataques de Pizarro que hicieran ver que el PSOE no se da por enterado de la crisis que vivimos. Pero además se le notó que es perro viejo y curado en este tipo de guerras, y cuando los argumentos de Pizarro no le dejaban margen de maniobra tiró de diccionario técnico de tal manera que los que no tienen un poco de idea del tema no se debieron enterar de nada, y yo reconozco que en algún momento no conseguí entender de qué estaba hablando, a veces me perdía, lo cual le daba, ante un ignorante en cuestiones económicas, la imagen de saber mucho y controlarlo todo. La imagen de Solbes se mantuvo estable todo el tiempo mientras que la de Pizarro fue de menos a más, pero empezó demasiado bajo y no consiguió superar a Solbes más que en algunos momentos puntuales.
En las últimas intervenciones, las de propuestas de futuro, fue el único momento en que Pizarro transmitió una imagen de capacidad para aportar nuevas ideas que arreglen la desastrosa situación económica que vivimos mientras que Solbes sólo transmitió continuidad en este desastre.
Un par de cosas positivas sí se pueden sacar de este debate: que por primera vez un socialista reconoce la existencia de problemas que hay que solucionar, otra cosa es que sus propuestas parecían ir por el camino de la continuidad y de no arreglar nada, y por otro lado que Pizarro, siendo novato, no salió tocado del todo, especialmente pensando que el que tenía enfrente se las vio en su día con Rodrigo Rato y sabe lo que es un debate donde te dan por todos lados y no sabes de donde te vienen. La verdad, eché de menos a Rato.
El PP ha perdido una oportunidad preciosa para que en el próximo debate entre Zeta y Rajoy, este último partiera con una cierta ventaja de imagen.
Al final, Solbes por un pelo.
Aunque según las encuestas hubo claros ganadores, yo no lo veo así. Según las encuestas de El Mundo, la percepción de los ciudadanos es que Pizarro barrió a Solbes, pero según la encuesta de TNS Demoscopia para Antena3 fue Solbes el que dejó tocado a Pizarro. Pues yo no he visto tales resultados, la verdad, yo he visto una mejor imagen de Solbes pero por un pelo.
Antes del debate (le llamaré así por llamarle de alguna manera), oía cómo mucha gente de derechas tenía clarísimo que Pizarro iba a comerse al socialista. Pues yo no lo tenía tan claro por dos motivos, el primero es que Pizarro es un novato en esto de enfrentarse a las cámaras, con moderador y dando imagen, lo suyo con los consejos de dirección y las juntas de accionistas, pero en la política es un principiante, mientras que Solbes ha pasado prácticamente toda su vida en estas labores y eso se nota. Por otro lado Pizarro está limitado por las órdenes de Génova de ser suavecito no sea que nos llamen crispadores, y sin embargo Solbes puede actuar a placer creando tensión o transmitiendo paz según convenga.
Centrándome en el debate, mi valoración se divide en dos aspectos: contenidos e imagen transmitida.
En el apartado de contenidos me ha dado una sensación de empate total y absoluto. Ninguno de los dos ha conseguido aplastar al otro con datos. Pizarro porque se calló muchos datos (supongo que por esas órdenes de Génova que no tienen ningún sentido) como el número de familias que no pueden pagar sus hipotecas y las Cajas de Ahorros se tambalean, o los dineros que cuesta al resto de los españoles el estatuto catalán, o los datos concretos del déficit por cuenta corriente (por si alguien no sabe lo que es esto, se refiere a que en las transacciones internacionales –importación y exportación– gastamos muchísimo más dinero del que ingresamos y eso nos empobrece a pasos agigantados). Y Solbes, simplemente porque no podía sacar nada mejor de lo que sacó con los datos que hay, y ya los moldeó y reconstruyó bastante con interpretaciones, en ocasiones, un tanto pintorescas.
Dicho esto, la cuestión interesante fue la de la imagen transmitida. No sé si por inexperiencia, por nerviosismo o por esa táctica pepera de no agresividad, de perfil bajo, el caso es que Pizarro comenzó tímido, blandito e inseguro, pero fue creciendo poco a poco hasta llegar a superar a su contrincante por momentos. Pero esa actitud inicial permitió a Solbes tomar la postura del viejo maestro sosegado que sienta cátedra cada vez que abre la boca. La falta de agresividad verbal de Pizarro le permitió mantener esa pose durante todo el debate, postura en la que fue fundamental el reconocimiento de algunos pequeños problemas que sufren los españoles, de forma que en cierto modo desactivaba los posibles ataques de Pizarro que hicieran ver que el PSOE no se da por enterado de la crisis que vivimos. Pero además se le notó que es perro viejo y curado en este tipo de guerras, y cuando los argumentos de Pizarro no le dejaban margen de maniobra tiró de diccionario técnico de tal manera que los que no tienen un poco de idea del tema no se debieron enterar de nada, y yo reconozco que en algún momento no conseguí entender de qué estaba hablando, a veces me perdía, lo cual le daba, ante un ignorante en cuestiones económicas, la imagen de saber mucho y controlarlo todo. La imagen de Solbes se mantuvo estable todo el tiempo mientras que la de Pizarro fue de menos a más, pero empezó demasiado bajo y no consiguió superar a Solbes más que en algunos momentos puntuales.
En las últimas intervenciones, las de propuestas de futuro, fue el único momento en que Pizarro transmitió una imagen de capacidad para aportar nuevas ideas que arreglen la desastrosa situación económica que vivimos mientras que Solbes sólo transmitió continuidad en este desastre.
Un par de cosas positivas sí se pueden sacar de este debate: que por primera vez un socialista reconoce la existencia de problemas que hay que solucionar, otra cosa es que sus propuestas parecían ir por el camino de la continuidad y de no arreglar nada, y por otro lado que Pizarro, siendo novato, no salió tocado del todo, especialmente pensando que el que tenía enfrente se las vio en su día con Rodrigo Rato y sabe lo que es un debate donde te dan por todos lados y no sabes de donde te vienen. La verdad, eché de menos a Rato.
El PP ha perdido una oportunidad preciosa para que en el próximo debate entre Zeta y Rajoy, este último partiera con una cierta ventaja de imagen.
Al final, Solbes por un pelo.
8 comentarios:
Es que elformato era horrible. Sólo faltaba que hubieran estado atados a una silla.
Pizarro gana mucho improvisando, hablando de forma natural. Así lo hubiera barrido.
Shasta, el formato era bastante malo, desde luego. Es posible que en un diálogo fluido sí que Pizarro hubiese estado mejor, pero con el formato utilizado aún estaba mejor cuando leía lo que llevaba preparado que respondiendo a Solbes. Creo que el gran error del PP fue de estrategia, y digo error del PP y no de Pizarro porque estoy convencido de que él siguió la estrategia que le marcaron en el partido.
Coincido con tu reflexión, pero no perdamos la esperanza en que Pizarro, se habitue a la marrulleria de los políticos sociatas. El hombre está empezando en estas historias, demosle un margen. Saludos.
Arcendo, si yo le doy todo el margen de confianza a Pizarro, soy consciente de que es novato y aún tiene que curtirse un poco, de quien no me fío un pelo es de los “estrategas” del PP, especialistas en cagarla y demostrar los complejitos de la derecha. De cualquier manera no le quitemos mérito a un Solbes que, con los datos en contra, ha sabido no solo capear el temporal sino salir mejor parado que su contrincante.
El debate lo ganó Solbes, y no por méritos propios sino por desmérito del contrincante.
No se puede ir a un cara a cara político, como se va a una Junta de Accionistas o a un Consejo de Administración;faltó agresividad,contundencia,mala leche.
Solbes manejó el debate con gráficos y estadísticas,que como los que nos dedicamos a esto sabemos,no significan en si mismas nada,salvo el uso y la interpretación que se den.
Solbes tenía todas las de perder con un panorama tan nefasto como el que se presenta, y Pizarro lo dejó que se escapara vivo;si creciendo al 3% perdemos empleo,¿que ocurrirá cuando estemos al 2´4%?,¿por qué no le atacó con los datos de la construcción que va a dejar en los próximos meses a más de 500.000 individuos en el paro?:¿por qué no le habló del cierre de empresas en este trimestre,más de 25.000,dato jamás visto en los último veinticinco años?¿por qué no le machacó con la perdida del consumo,con la disminución del porcentaje de ventas en periodos consumistas como Navidades y rebajas?.
Un profesor mio de Deusto,en el ICADE,decía que "los que saben realmente de economía,caben en un microbús.El resto toca de oidas".
Espero que en el PP hayan tomado nota,y Rajoy salga contra Zapatero con el cuchillo entre los dientes;como vaya con su soflama habitual y su tono de ursulina modosa,lo van a dejar en cueros.
A Pizarro se le vió que no es político y Solbes tiene mucha experiencia en engañar a la gente y de hacer político .Pero sin duda estoy convencido que de economía Pizarro sabe más que Solbes de aquí a Lima .Sino no se explica que con Felipe quebraba la Seguridad Social y estaba Solbes al mando ,ahora ya estamos viendo lo que está pasando y Solbes está al mando .¿que raro verdad?Esto no es coincidencia .Saludos .
Para ganar un debate no solo hay que tener la razón, hay que convencer a los españoles de ello.
Efectivamente, Gutiforever, en líneas generales no ganó Solbes, la pifió Pizarro, pero hay que reconocerle al socialista que supo aprovechar perfectamente la blandura del “popular” para adoptar una imagen que le hizo parece superior. Por supuesto, esa apariencia de superioridad se cae si vemos con detenimiento las cosas y comprobamos que Solbes no hizo ni una sola propuesta de futuro mientras que Pizarro daba datos sobre las estrategias a seguir para solucionar la situación, pero primero bebería haber arrinconado a Solbes antes de permitirse lujos.
EspañaLibre, estoy plenamente convencido de que Pizarro sabe muchísimo más que Solbes y de que además tiene la experiencia necesaria para poder llevar a la práctica proyectos que realmente aporten soluciones. Pero en política basta con ser bueno, sobre todo hay que parecerlo, que es justo lo que apunta ZapatoVelozz.
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